Santo Domingo.- La temporada de huracanes de 2024 en el Atlántico, que comienza oficialmente este sábado, se prevé que sea una de las más activas e intensas en décadas, con la formación de hasta 13 huracanes, y la preocupación de que el número de ciclones que toquen tierra pueda ser el doble de lo habitual.
Es un pronóstico de predicción tan elevado
que el administrador de la Oficina Nacional de Administración Oceánica y
Atmosférica (NOAA, en inglés) de Estados Unidos, Rick Spinard, señaló que
se trata de "la perspectiva de temporada de huracanes más
alta que la NOAA haya emitido jamás".
La NOAA advirtió de que había un
85 % de probabilidades de que la temporada ciclónica fuese superior a
lo normal, con entre 17 y 25 tormentas con nombre y de 8 a 13 huracanes,
de ellos entre 4 y 7 de categoría mayor.
Son cifras que están muy por encima del
promedio por temporada, que es de 14 tormentas con nombre y siete huracanes,
tres de ellos de categoría mayor, y que de concretarse podría convertir
la temporada ciclónica de este año en el Atlántico en una
de las peores en décadas.
"La Niña" y las aguas
del Atlántico sobrecalentadas.- María Torres, meteoróloga de
la NOAA y directora de comunicaciones del Servicio Meteorológico
Nacional, dijo que "un factor muy importante que favorece el desarrollo de
los sistemas tropicales este verano y otoño son las temperaturas calientes del
océano".
Esto, en combinación con el regreso en el
Pacífico del fenómeno de 'La Niña',
que "tiende a reducir los vientos cortantes, conocidos como vientos de
cizalladura, en la zona de formación de sistemas en el Atlántico", hace que "haya
una probabilidad más alta de tener más tormentas", según la experta.
Al margen de la comparación de las temporadas de huracanes, dado que "cada temporada es única", lo
importante es que debemos estar preparados y tener un plan", advirtió
Torres, en referencia a una temporada ciclónica
marcada por temperaturas oceánicas casi récord en estos meses.
Hugh Willoughby, profesor del
Departamento de Tierra y Medioambiente de la Universidad Internacional de
Florida (FIU), se mostró muy preocupado con los pronósticos generales y
advirtió de que "es muy probable que tengamos en la costa estadounidenses
uno o dos aterrizajes de fenómenos realmente dañinos", con un coste en
daños materiales de más de 30.000 millones de dólares, como dijo a los
periodistas.
Fuentes: Oficina Nacional de
Administración Oceánica y Atmosférica (NOAA, en inglés) de Estados Unidos y agencias
internacionales de prensa.
0 Comentarios
Deje su comentario
Emoji